NOTIDENTAL: Las prácticas "poco saludables" de la Navidad acentúan el mal aliento


La halitosis o mal aliento puede acentuarse en estas fiestas navideñas tras la ingesta de comidas copiosas, una mayor cantidad de bebidas alcohólicas y prácticas "poco saludables" como fumar. 




Por ello, el Colegio de Dentistas de Santa Cruz de Tenerife ha querido recordar la conveniencia de no olvidar en estas fechas la higiene bucal mediante el adecuado cepillado de los dientes para, de esta forma, evitar que queden restos de comida en la boca que provoquen la proliferación de bacterias y, como consecuencia, halitosis y/o caries.

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Casi un 90 por ciento del origen de la halitosis está en la boca, por lo que, además de producirse por malas digestiones, el mal aliento puede ser un síntoma de enfermedades bucodentales que necesitan del diagnóstico y posterior tratamiento a manos de un dentista.

De hecho, la gingivitis (inflamación y sangrado de encías producido por bacterias) y su agravamiento en forma de periodontitis (enfermedad crónica que afecta al tejido que sostiene los dientes) son dos patologías que explican el 59 por ciento de los casos de halitosis.

El mal aliento puede estar también provocado por la acumulación de gran número de bacterias en las vellosidades (papilas) de la lengua, las caries, la retención de restos de comida no eliminados con una adecuada higiene bucal o, incluso, por prótesis mal ajustadas o deterioradas.

Debe ser un dentista quien evalúe las causas y el tratamiento para descartar que el motivo de la halitosis radique en patologías bucales, enfermedades sistémicas, alteraciones hormonales, problemas en las vías respiratorias y/o digestivas, ingesta de medicación o de cantidades insuficientes de líquidos.

UNA LIMPIEZA EFICIENTE

Una limpieza eficiente de la boca es fundamental para combatir la halitosis. Debe realizarse un correcto cepillado de los dientes tres veces al día, sin olvidar también la lengua y las encías.

Para acceder a las cavidades inaccesibles al cepillo, donde pueden acumularse restos de comida, es recomendable el uso de seda dental. Además, se debe acudir al menos una vez al año al dentista para detectar, en sus fases tempranas, cualquier patología bucal y realizar una limpieza profesional, que permita eliminar el sarro.

Éste se produce por una acumulación de sales de calcio y fósforo, que no es más que el resultado de la mineralización de la placa bacteriana, causada, precisamente, por microorganismos, saliva y restos de alimentos.

El sarro, uno de las causas de la halitosis, sólo puede ser eliminado mediante la limpieza realizada por un profesional con el instrumental adecuado.

Fuente: europapress.es





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