La preparación dental debe ser realizada de acuerdo a los principios científicos mecánico, biológico y estético establecidos.
Ella constituye una de las etapas más importantes en la construcción de una pieza protésica, sea como corona individual o retenedor de prótesis fija.
Fallas en la preparación dental condicen al fracaso de la restauración. La reducción insuficiente de la estructura dental puede causar sobrecontorno, comprometimiento estético, alteración del color (opacidad) e inflamación gingivial.
Si ocurre un desgaste excesivo del diente, puede originar daños pulpares, debilitamiento de la estructura dental y disminución de la retención y resistencia.
Si la preparación de la terminación cervical se localiza profunda, violando el espacio biológico periodontal una de las cuatro alteraciones patológicas ocurrirían: formación de bolsa infraósea, recesión gingival y pérdida ósea localizada, hiperplasia gingivial localizada con mínima pérdida ósea o combinación de las alteraciones descritas.
Para realizar correctamente el tallado dental hay que saber tres aspectos fundamentales:
1. el conocimiento de la morfología dental y la unidad dentogingival (espacio biológico),
2. la cantidad de remoción de estructura dental exigida por los materiales restauradores y
3. el formato y diámetro de las fresas utilizadas para el desgaste dental.
Además es importante aplicar de manera eficiente los procedimientos técnicos del tallado. A menudo la preparación dental es hecha con negligencia por el odontólogo porque se cree que de todos modos el diente preparado va a ser cubierto por la corona protésica.
El propósito de este trabajo es presentar una técnica de preparación dental simplificada que sea de fácil comprensión y aplicación para el clínico y el estudiante.