El anclaje esquelético con miniimplantes ha ayudado a corregir los más diversos tipos de maloclusiones.
La literatura muestra un aumento significativo en el número de publicaciones sobre este tema, resultado de la búsqueda constante por comprender el uso de los miniimplantes y su asociación con diferentes tipos de aparatos de ortodoncia.
Esta demanda en el uso de miniimplantes favorece el constante desarrollo de nuevos productos e idealizaciones de nuevas técnicas, requiriendo que el ortodoncista esté actualizado sobre las diferentes formas de utilizar este dispositivo de anclaje transitorio.
Actualmente, el miniimplante de ortodoncia (MIO) se ha vuelto popular en 3 tipos, a saber, el área interradicular, extraalveolar y palatina. Para el uso de cualquiera de estos tipos de MIO es necesario desarrollar la habilidad para la inserción.
Esta habilidad se adquiere al comprender la selección y la habilidad de instrumentales para la inserción y los tipos de MIO; identificación de áreas favorables para la inserción y observación de los procedimientos técnicos realizados para una adquisición más rápida de la curva de aprendizaje.
Además de comprender estos 3 principios, también es esencial comprender los límites del movimiento y la biomecánica de los dientes.
Como ocurre con cualquier tratamiento de ortodoncia, los que se realizan con MIO requieren conocer los límites biológicos del movimiento dentario y los sistemas de fuerza que se generan a partir de la activación del aparato de ortodoncia fijo.
En los casos tratados con MIO, no hay pérdida de anclaje, la retracción de los incisivos superiores es casi el doble que la observada con el uso de otros tipos de anclaje.
Profesor en Unesp de Marília
Estudió en Amilcare Mattei Prof
Estudió Maestría en FOB - USP
Estudió Doctorado en Ortodoncia en FOB - USP
Estudió Post-doctorado en University of Houston
Esta mayor magnitud de movimiento dental requiere que los profesionales tengan un conocimiento específico de los principios de la biomecánica con MIO.
